UN ALEGRE BOLERO TRISTE
Poemas De Amor Y Desamor
un loco (de atar) por mi Mujer.
Aprendí a adorar a mi Madre, luego empecé a amar a la Madre del Nazareno. Y la amé tanto que Jesús debió sentir celos. Siempre he defendido ciegamente que yo no cambio a mi Madre de vientre por ninguna otra Mujer. Y nadie cambia a su Madre por otra. No conozco a nadie que lo haya hecho. Con mayor razón tampoco cambio a mi Madre espiritual, Madre de Belén, María.
Dar a conocer estos testimonios de amor y desamor no tiene ningún afán de lucro o fama. Sólo quiero compartirlos, como comparte uno el Alma, con los amigos y lectores. Es algo así como dejar una constancia, un testamento a esta mujer que me alegró la vida. A la mujer causante de estas vainas que me hacen exponer al ridículo. Ella tiene un hechizo indescifrable. No creo en la reencarnación, pero sí creo en la resurrección al final de los tiempos. Y creo en esta mujer con su íntegra nobleza y su doble belleza, no sólo física sino química, dueña de una incomparable belleza espiritual. Mi deseo, era, es y será vivir una vida feliz, una vida alejada del ruido, una vida anónima, una vida sabrosa y relajada al lado de ella. leer todo...
Garcilaso de la Vega
el bachillerato. Garcilaso tuvo una frustración porque estudió Ingeniería Civil en la Univerdad de Cartagena hasta quinto semestre; luego estudió Contaduría Pública en la misma universidad; esto lo hizo acompañado de su único amor Dora Marrugo González, los dos se graduaron de manera conjunta. Pasados los años estudió Abogacía. Garcilaso y Dora Isabel tienen tres hijos, Garcilaso Antonio, Fernando Enrique y Dora María.
Aprendió el hábito de la lectura de su padre Reinerio, quien tuvo la osadía de ponerle de nombre Garcilaso, de niño lo ponía a escuchar poemas. leer todo...