El libro describe, basado en una consistente y auténtica documentación histórica, la extraña e intrigante relación de Simón Bolívar, a partir de su comprobada promoción masónica en París en 1806, con otros próceres y líderes suramericanos, los cuales por coincidencia también se adhirieron a aquella sociedad secreta justamente en el período en el cual se dio el proceso de independencia contra España. Esta singular relación habría de pasar por momentos iniciales de acercamiento y fraternidad, luego de calma e indiferencia y más tarde de inesperada pugna y duros enfrentamientos hasta convertirse en una verdadera guerra clandestina por el poder, donde no dejaron de sentirse las influencias de las potencias europeas que con fríos cálculos luchaban por el dominio estratégico y por las oportunidades económicas potenciales en la nuevas repúblicas americanas. A pesar del obligado ambiente de ocultismo que caracterizó aquel período y a los pocos testimonios de sus principales protagonistas, la investigación exhaustiva de sus detalles, más el acopio y confrontación de las evidencias encontradas que tomaron, al volverse repetitivas, el carácter de un patrón de conducta de cobertura continental, llevó directamente al autor a postular algunas hipótesis quizás sorprendentes pero razonablemente sustentables sobre las causas y consecuencias de esta poco estudiada conexión, no obstante que al mismo tiempo se da al lector en el texto, la libertad de asumir un criterio distinto o una particular interpretación. Es obvio que por la naturaleza del tema era inevitable que apareciese "el secretismo" y trastornara los momentos claves de la narración, de tal forma que la investigación adquiere un solemne aspecto de intriga al derivarse los hechos reales hacia el misterio y la especulación y al comprobarse que los personajes involucrados son, además de Bolívar, otros míticos libertadores suramericanos, como el general Santander en Colombia, San Martín en Argentina y O'Higgins en Chile, por sólo nombrar a los más destacados. leer todo...