ACORDES DE VIDA
y anhelo. Por eso el poeta recuerda: Una vez tiré una piedra al río. Salpicó el agua y la piedra se me ha perdido. Volví a tirar otra, pero no tenía sentido. Me metí en el río a buscarla pero habían muchas iguales a la mía. Retrocedí y miré al río. Siempre corría sin detenerse, sin mirar a la piedra mía. Entonces comprendí que el río es como la vida, nunca se detiene aunque se lleve al alma mía.
Cuadro de la portada:
Concierto en la vigilia, de Diego Fortunato (1987).- leer todo...
Diego Fortunato
teatro, en la Escuela de Teatro Lily Álvarez Sierra de Caracas, pintura, leyes en la Facultad de Derecho y periodismo en la entonces llamada Escuela de Periodismo de la UCV. Desde temprana edad fue seducido por las artes plásticas y la literatura gracias a la pasión y esmero de su madre, ávida lectora y pintora aficionada. Sus novelas, teñidas de aventura, acción y suspenso, logran atrapar en un instante la atención del lector. Sus poesías, salpicadas de delicada belleza, están tejidas de mágicas metáforas. leer todo...