Marchigüe y sus Raíces
relativa a su pueblo, respaldado por acápites obtenidos de la recopilación de antecedentes. Es menester tomar en cuenta el llamado de alerta que nos propone para conservar los valores de autenticidad que la globalización lentamente está desapareciendo.
Obra que sin duda reafirma el apego y cariño que el autor tiene por su zona, con todos los componentes que involucra, humanos, sociales, socioeconómicos, religiosos, culturales, la fauna y flora, el relieve, su historia no escrita, etc...
Valentín Gajardo a cumplido a satisfacción con el anhelo puesto en su tarea creativa de lograr en su libro la alianza entre el forjado sentimiento de su amor por su pueblo y un claro decir poético, como autor se juega la limpia carta literaria de clamar por una vida más armónica entre el hombre y la naturaleza, valorando el aporte de cada uno de los habitantes de Marchigüe, sus protagonistas, personas sencillas; nos llaman a conocer de su existencia, de sus sueños, la manera más directa ésta, de saber de la vida y las posibilidades de vislumbrar un destino global profundamente humano. Al apreciarlos como hacedores del pan y la poesía, rechaza de hecho el siempre omnipresente error histórico de los hombres de centrar el foco de la importancia sólo en las grandes personalidades y no en la gente común. El nombre de Marchigüe, nos dice, evoca un bautizo de limpio sudor, de trabajo áspero e inteligente...
Es dura la llamada modernidad que avanza con paso de carga con su vertiginoso avance tecnológico desmoronando identidades, pero los versos que comentamos nos hablan de un pueblo que mantiene con orgullo el ámbito rural, su estilo de vida y donde los habitantes no renuncian a su espaci leer todo...