Al Capone y Los Intocables
Llegó muy joven del sur de Italia hacia 1890 y logró encontrar en Chicago un puesto de barredor de calles.
Jim Colosimo tenía el sentido innato de la intriga y de la "combinación". Las luchas de los partidos políticos en Chicago eran ardorosas, sin escrúpulos, tumultuosas. El joven italiano se echó en ellas de lleno, como agente electoral y rindió grandes servicios a numerosos elegidos. Muy pronto llegó inclusive a explotar un pequeño "saloon". Entre los clientes de ese bar había una mujer muy bella, Victoria Moresco. Jim se enamoró de ella y la hizo su esposa.
Victoria Moresco, era una mujer práctica. Ella hizo ver a Jim las enormes ganancias que podría realizar interesándose en la explotación de una serie de "casas de sociedad". Con la colaboración y experiencia de su diligente esposa. Colosimo montó una cadena de esos establecimientos que la moral reprobaba y que la policía toleraba. Muy pronto fue lo suficientemente rico para abrir en el número 2126 de la South Wabash Avenue, un restaurante de gran lujo, el "Colosimos Café" cuya moda fue inmediata. Frecuentado por la clientela mas rica y más elegante de Chicago, el Colosimos Café hacía enormes ganancias y podía verse allí, vigilando todo, reinando sobre todo, recibiendo con gracia a los clientes, al ex-barredor de calles vestido con una afectada elegancia y cubierto de joyas en las que brillaban enormes diamantes. leer todo...
Víctor Hugo Panana Alza
E. Billinghurst en Barranca
Trabajé en el departamento Técnico del Concejo de Puerto Supe como ayudante en Topografía luego como cobrador de arbitrios municipales del puerto. Posteriormente trabajé en la Fábrica de Gaseosas La Concordia como empleado en el área de ventas durante cinco años y medio pasando por los puestos de ventas, almacén, secretaría cobranzas, cuentas corrientes, administrador de una sucursal entre otros cargos. Me trasladé a Lima en el año 1972 trabajando en forma independ leer todo...