Luis Fernández era un poeta, y estoy totalmente seguro de tres poemas suyos, "Adiós Cabrera" y "Pueblo Viejo", que reposan al final del capítulo Contemplación y que son una apología al municipio y a la región que tanto quiso, el primero escrito en una triste partida de la cual, desde sus letras, aseguraba nunca más volver; el segundo fue el himno escrito a una vereda que lo vio transitar, crecer y que en sus buses escaleras abrió caminos, corazones e historias; el tercer poema titulado "A mi tierra nativa", debía cerrar el capítulo Nostalgia, como epifanía del retorno, finalmente, partir de los Llanos a su tierra natal.

"Adiós Cabrera" fue el primer poema que le conocí, "Pueblo Viejo" fue el último y, paradójicamente, encontró su postrer adiós entre estos dos puntos de su amada región del Sumapaz. Hubo un cuarto poema que se perdió en el tiempo y la razón inclemente: "...recordar nuestros ratos felices de Melgar...", es todo lo que queda. leer todo...

Las historias expuestas en este libro, corresponden a un ciclo de creación narrativa por parte de los estudiantes del grado once de la IE Fagua del municipio de Chía; con el pasar de los trazos y borradores, alternando con aquellos del ejercicio y la escritura académica, los escritores profundizaron y fueron creando un estilo, algunos con más experticia que se dio desde anteriores ejercicios de incursión narrativa, otros tomando su primer intento en la producción literaria escrita, o retomando aquella que se había estancado desde hace mucho tiempo en la curiosidad e inventiva de la niñez. Este texto nos muestra la narrativa infantil haciendo presencia desde la fábula; la autobiografía se muestra con necesidad en relatos íntimos y reveladores; el suspenso del crimen, la investigación, villano y héroe, se da desde la idea policiaca; la fantasía toma un aire muy creativo con tiempo fenomenales, naciones de ensueño y personajes mágicos; el amor hace su aparición contando de manera muy romántica la entrada a los amores y desamores de la adolescencia; se pueden ver, inclusive, relatos psicológicos que ponen a pensar al lector desde mentes desubicadas y perversas... leer todo...

Estos versos, acá presentados, nacieron en los paisajes de Chocontá, Cundinamarca; apreciando los mágicos escenarios y la rica diversidad que allí se encuentran; dando una mirada a la riqueza agrícola, a las características de la región e importancia en su ubicación geográfica.

Vagones es un derrotero para un tabú, una historia que se quedó en pequeñas notas estancadas en la garganta y en los dedos; unos versos cortos, carentes de receptor que reposan en el limbo, ahora huérfanos, anacrónicos, pero, en fin, versos, y como tal, buscan la forma de llegar a su destino.

Estos textos nacieron al azar, al asalto de los versos, inmediatos y dicientes; escritos al margen de titulares y artículos que profanaron el discurso amarillista. Las hojas se atiborraron de versos, algunos casi incomprensibles jeroglíficos, de frases regurgitadas, de tachones que más que ocultar explicitaron las ideas, conformando así este palimpsesto que logró dar vida a un centenar de poemas minúsculos, que encierran todo un universo de sensaciones diciendo tan poco.

No hay que pensarlo, las cosas hay que decirlas de inmediato; hay sentimientos que se escapan a la composición prolífica, a la acomodación y a las reglas, no hay que construirlas sino dejarlas ser. Muchas veces el verso lacónico es más preciso, más disiente y sincero, porque no se maquilla y se hace así mismo, solo se debe estar atento a escribir y a conjurar lo que finalmente podrían ser melancolías minúsculas.

Dividida en tres espacios, Apología del Insomnio nos entrega una mirada al romance, fugaz si de amor eterno se trata, en 'besos al viento', donde es el desamor, más que todo, el protagonista de los primeras páginas; en 'la poesía ha perdido', se presenta una conmemoración a la pérdida de un poeta, con versos que emanan nostalgia, pero que más allá de una exaltación del luto, presentan la posibilidad de la creatividad misma a partir de la melancolía; finalmente, 'la noche de todas las noches', es un compilado de nocturnos en vela, de textos que nacieron en las frías madrugadas de insomnio, donde se atiborraron todos los demás sentimientos humanos para estallar en manuscritos a media noche, a media luz. leer todo...

Los autores, en esta nueva versión, se dieron a la idea de escribir con un compromiso que sobrepasó las expectativas, tanto que fue necesario dejar los criterios de extensión y permitir explorar el cuento largo, el manejo de prolíficos diálogos y la práctica de capítulos. Se dio, entonces, la idea "Fagua: más allá de las aulas", con una extensión de tres trabajos entre los que se encuentran dos cuentos largos y otro más con un evidente coqueteo a novela corta, compilados en otro pequeño libro, titulado "Mentalhi, Levina y Eviterno". Las narraciones son parte de un trabajo juicioso en el que se advierte la imaginación, la creatividad y un esfuerzo por fortalecer el proceso de producción textual, centrado en un proyecto que a la par del texto académico, le da un valor significativo al texto literario como componente en el desarrollo de la escritura y el pensamiento. leer todo...

La ventana desde sus matices, nos da la oportunidad de asomarnos a estos versos. "Serenata", es la idea romántica milenaria, es mirar hacia unas cortinas oscurecidas, esperando el más leve movimiento para entender que las palabras de amor fueron atendidas, esperando a que la luz, por fin, se encienda. "Entre cortinas" es una idea diferente, atendiendo al secreto, una mirada que escudriña tras bambalinas, sin esperanzas a un deseo muchas veces prohibido o en otros casos extinto. "Desde el balcón" es la contemplación, doblarse a las barandas que sostienen la claridad del pensamiento y reposar en tardes calmadas y mirar mucho más allá de los primeros planos, es el leer entre líneas el día a día. Finalmente, "A ras de una ventana", juega más con los marcos, los balcones, las ventanas y cortinas como protagonistas esenciales, en una idea de complicidad, que logra conversar cuando los cometidos no se cumplen. leer todo...

Podrá apreciarse en los presentes textos, tanto en Mujer que mece la cuna como en otras mujeres, un panorama singular de figuras femeninas que presentaron, desde su realidad directa o lejana, un sentimiento de admiración, de curiosidad, de tristeza, de amor de frenesí o de sensaciones cuyo nombre aún no se ha logrado definir.

Eduardo Fernández Castañeda


A lo largo del viaje de mi lectura, distintos pensamientos y cuestionamientos atravesaron mi mente, todos relacionados con cómo un hombre puede percibir a una mujer. Así mismo, cada vez me convencía más de algo que irradia este libro de principio a fin: observación, sensibilidad y belleza.

Ana María Hernández leer todo...

El presente volumen cierra el tríptico Fagua, con el subtítulo "The key to entering new worlds", una compilación de cuentos creados, pensados y, siguiendo la idea, vividos por los estudiantes de grado once de la Institución Educativa Fagua del municipio de Chía. En su tercer año consecutivo, se logra, a partir de una narrativa propia, la cocreación de mundos alternos que, nuevamente, hacen uso de la fantasía, la ficción, el suspenso, el romance, pero evidenciando en sus temáticas la biografía implícita y por primera vez, la inclusión de género. Las distintas representaciones del mundo que tuvieron los autores demuestran la necesidad de crear espacios como este para que los estudiantes puedan poner en sus voces la denuncia, el deseo, la declaración, la confesión, el grito que se ha contenido por tanto tiempo y que la escritura, una vez más, se convierte en aliada y, por qué no, en cómplice. leer todo...

En este libro, en su primera parte, el maestro pretende evocar esos sentimientos nacidos en las aulas, en la labor más noble y compleja, donde todo se muestra más allá de la cotidianidad académica, apreciando esos detalles que surgen entre las clases, en los pasillos, en las relaciones complejas. En la segunda parte, se logra traer de manera tangible la idea de la escritura, la subjetividad, la libertad y el conjuro, que se resisten y se revelan en las últimas páginas de los cuadernos, en las paredes, en los pupitres, en esos manojos de papel arrugados que van a parar a la basura... cuánta poesía se ha perdido en un ademán de desprecio. Finalmente, en la
tercera parte, el haikú como una manera de observación, en un lugar donde aún quedan borrajos
de naturaleza, donde, si se logra concentrar, aún se puede escuchar el silencio majestuoso e inmenso de la tierra. leer todo...