CACHIMBERO

CACHIMBERO. Nombre tomado de un legendario lugar, en la Costa norte de Colombia, entorno de difusa demarcación geográfica, por causa de las arremetidas del mar. Su exacta ubicación sigue siendo objeto de muchas conjeturas. Esto lo ha convertido en fuente de inspiración para el colectivo popular, también para poetas y escritores. En esta novela se trata de un asentamiento humano, con un comportamiento social excepcional, que comenzó a partir de un grupo de amigos que decidieron vivir en ese acogedor entorno entre el mar y la Ciénaga Grande, mas su extensión no se ha establecido. El hallazgo de un epitafio versificado, inscrito sobre una antigua lápida de mármol, les permitió a sus últimos pobladores concluir sobre anteriores devastaciones y repoblaciones del mencionado entorno.
La existencia de un gigantesco árbol de macondo, en medio de la espesa vegetación manglera, generaba un extraño fenómeno en las mujeres que, estando en las primeras semanas de embarazo, se acercaban a éste. El parecido físico entre muchas personas hacía saber que eran hermanos gemelos o trillizos. Esto permitió el crecimiento acelerado de la población, situación que, al parecer, era causada por el gigantesco árbol. Muchos de sus habitantes tenían una percepción distorsionada de la realidad, debido a los múltiples mitos allí difundidos. Las decisiones de la Corona Española, que en ese período regían en el nuevo mundo, se vieron debilitadas frente a las propias decisiones del pueblo cachimberiano, que desobedeció y rechazó lo que consideró desfavorable dentro de su amado terruño, no permitiendo que los obstinados hombres de la realeza saciaran su sed de oro. La Inquisición tampoco pudo ejercer su poderío allí, porque, hasta algunos animales, parecían estar en su contra.
Fue un trozo de cultura mestiza, que habiendo asimilado la inoculación de una lengua diferente a la primitiva, también otras creencias religiosas, sus habitantes se regían por sus propias leyes, acordes con sus costumb leer todo...